Gusto: Una mazorca tostada despacio sobre unos hierros de metal oxidados que se
apoyan en cuatro piedras enormes en medio de la calle.
Oído:
El ruido que haces con la mano en las sábanas de la cuna, apareciendo de pie de
repente y gritando "bebebebebebe" al mundo.
Vista: El atardecer que a veces se queda a media luz, como esas bombillas a punto de
fundirse.
Extraordinaria... Y ese niño es espectacularmente guapo!
ResponderEliminarLas fotos y ese País tienen algo especial...Como TU!